Un grupo de arqueólogos rusos e italianos han hallado un altar ritual de basalto, construido para un barco sagrado y con una inscripción jeroglífica. Este descubrimiento, calificado por el Servicio de Antigüedades de Sudán como «el más importante de la década», se ha producido en Abu Erteila, a alrededor de 200 kilómetros al norte de Jartum, la capital de Sudán. «Todavía estamos estudiando el texto de las inscripciones jeroglíficas en egipcio, pero ya hemos identificado los pergaminos con los nombres de la pareja real que se mencionan, el rey y la reina Natakamani Amanitore, que gobernaron en la época dorada de la civilización meroítica» —entre los siglos 1 a. C. y 1 d. C.—, destacó Eugenio Fantusati, el líder del equipo internacional.